La Terapia de Pareja es la Ante Sala del Divorcio. Mito o Realidad?

Cuando hablamos de Terapias de Pareja las aguas se dividen. Algunos piensan que cada uno tiene que resolver sus problemas por separado y otros  que los problemas son del propio vinculo.

Es cierto que cada uno llega con sus propios conflictos, y que los conflictos de uno parecen no sumarse con los del otro , sino que se multiplican.

Es inevitable que cuando hablamos de terapias de pareja, no todos tengamos las mismas opiniones, pero las diferencias se basan en las experiencias particulares de cada uno. Hay muchas parejas que cuentan haber podido resolver problemas de esta forma y también hay muchos, tal vez mas, que no encontraron la solución al problema.

El error puede estar en creer que la terapia de pareja fue exitosa cuando la pareja continua con la relación. Suele suceder que el  espacio sirve para terminar de darse cuenta que es momento de terminar con la relación.

Todavía cargamos con la idea de que las relaciones son para siempre, y de que nos casamos para toda la vida. Toda la vida puede ser bastante larga y las cosas  y las personas vamos cambiando, lo cual no es un problema en la medida que el otro nos acompañe, pero cuando los cambios van en direcciones opuestas suele suceder que sin darnos cuenta dejamos de acompañarnos y llega el momento de hacerse cargo de que como todo en la vida, las relaciones de pareja también pueden terminarse.

Hay parejas que llegan al espacio terapéutico cuando la relación ya está terminada y encuentran un espacio donde cerrar la relación de la mejor manera posible. Otras parejas llegan en momentos de crisis pero  que pueden resolver, esos son los casos donde la confianza y el respeto no se rompieron. Cuando se rompió la confianza no hay terapia de pareja que salve esa relación.

Los casos en los que la terapia de pareja parece tener mejor pronóstico es cuando los problemas tienen que ver con dificultades de comunicación, en esos casos algunas intervenciones del terapeuta, que buscan restablecer canales de comunicación y acuerdo, alcanzan para que la pareja resuelva sus diferencias y siga adelante.

También sucede que en la sesión de pareja se llega a la conclusión de que uno de los integrantes o ambos tienen que resolver temas en un espacio individual para luego poder tomar una decisión como pareja.

Lo que hay que tener presente es que muchas veces la pareja se termina pero la relación continua por muchos años más, en general cuando hay hijos, por eso es importante poder resolver los problemas de la mejor manera, dejando rencores y enojos atrás.

Como verán, no es un tema sencillo, lo importante es buscar la forma de tener relaciones saludables y nutritivas, vínculos que nos ayuden a crecer, parejas que nos acompañen y se dejen acompañar ,y que cuando las ganas de estar juntos ya no están, podamos seguir cada uno su camino, habiendo aprendido todo lo que pudimos aprender de esa relación y pudiendo agradecerle a esa persona por los meses o los años que nos acompaño.

Pensar que uno se va a separar por ir a terapia es como pensar que uno se enferma por ir al medico. 

La terapia de pareja no salva ni termina con ninguna relación, pero es un espacio que bien provechado puede hacernos las cosas más fáciles.